El gran acueducto de las Lagunas de Ruidera aparece hoy silencioso y escondido, como ruina sin sentido ante la que todo el mundo aparta la mirada. Hace más de un siglo fue la culminación de la faraónica obra que constituyó la construcción del canal de derivación de la central hidroeléctrica de Santa Elena, cuyas dimensiones alcanzan casi los 4 km de longitud.
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¿Qué es un acueducto?
Acueducto (del latín, aquaeductus, que transporta agua) es un sistema o conjunto de sistemas de irrigación que permite transportar agua en forma de flujo continuo desde un lugar en el que está accesible en la naturaleza hasta un punto de consumo distante, generalmente una ciudad o poblado.
En ingeniería moderna, el término acueducto se usa para cualquier sistema de tuberías, zanjas, canales, túneles y otras estructuras utilizadas para este propósito. El vocablo acueducto también, a menudo, se refiere específicamente a un puente en un curso de agua artificial.
Acueducto del canal de Santa Elena
El canal de derivación de la central hidroeléctrica de Santa Elena llevaba las aguas por la vertiente derecha del valle del Alto Guadiana salvando los desniveles de las vaguadas con acueductos y atravesando los espolones de carniolas que se asoman al valle mediante tres túneles.
Levantado en los albores del siglo XX, su función era salvar el desnivel de la cañada que desemboca en la orilla de la laguna Salvadora, en el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera.
El canal, con una longitud de casi 4 km, llevaba las aguas desde la toma situada en la laguna San Pedro hasta la cámara de presión situada por encima de la sala de máquinas de la central, en la cabecera de la laguna Colgada.
El gran acueducto tiene una longitud de 154 metros y una altura máxima cercana a los 10 metros. Consta de una única arquería sobre pilares de base rectangular compuesta por 5 arcos de diferente luz, dependiendo del tramo y las adaptaciones al desnivel del terreno.
Plano topográfico 1916
En 1916, pocos años después de la entrada en servicio de la central de Santa Elena, el ingeniero Ezequiel Naranjo trazó un plano topográfico de la cabecera de las Lagunas de Ruidera para el ordenamiento de zonas de regadío del río Alto Guadiana.
En el mapa aparece nítidamente dibujado con una línea azul el canal de derivación de la central de Santa Elena serpenteando por las laderas del margen derecho del valle del Alto Guadiana. A la altura de la laguna Salvadora, en la parte honda de la cañada, el acueducto queda representado con numerosas rayas, también azules, transversales al recorrido de la canalización y nominado como «Acueducto».
Fotografía aérea 1956
En los años 1956-57, el Army Map Service de EEUU, con la colaboración del Ejercito del Aire español, realizó un vuelo fotogramétrico. El resultado fue una serie de fotogramas en blanco y negro a una escala de vuelo aproximada de 1:32.000, gracias a los cuales podemos observar el estado del tramo fluvio lacustre situado entre las lagunas San Pedro y Lengua a mediados del siglo XX.
La imagen precedente nos muestra un tramo del valle del Alto Guadiana con unos niveles hídricos bajos. La barrera tobácea que separa las lagunas Lengua y Salvadora se encuentra totalmente seca; la laguna superior no vierte sus aguas en la inferior. Las numerosas tonalidades blanquecinas en las orillas de los vasos lacustres contrastan con el color oscuro de sus aguas.
El trazado del canal de derivación, claramente visible entre las lomas de los montes del margen derecho, cruza la cañada, todavía casi virgen, por el acueducto. Destacan, en tonos claros, un camino y un cauce fluvial seco que atraviesan la canalización entre los ojos del acueducto.
Estado Actual
Desde que en el año 1972 parara definitivamente sus máquinas la central de Santa Elena, el acueducto de las Lagunas de Ruidera quedó fuera de servicio. Posteriormente, la desaparición de diversos tramos del canal aguas abajo de la toma de aguas secó su caz definitivamente.
En la actualidad el acueducto presenta un lastimoso estado de abandono. Por motivos de seguridad se encuentra cerrada al público su línea de conducción superior y, en sus centenarios pilares, numerosas cicatrices atestiguan el paso del tiempo y el olvido.
Ojalá pueda recuperarse este hermoso vestigio de la arquitectura hidráulica industrial de principios del siglo XX.
Imagen de portada. El acueducto de las Lagunas de Ruidera en la actualidad.
(1) MARIN, JC., El hombre y el agua de las Lagunas de Ruidera, Tomelloso, Ediciones Soubrier, 2007.
(2) NARANJO, E. Ordenamiento de zonas de regadío. Río Alto Guadiana. 1916. Archivo General de la Administración. Ministerio de Cultura. Signatura Ca 18302.
(3) Mosaicos de ortofotos generadas a partir del vuelo americano AMS-1956-57 (Serie B). OrtoPNOA-H 1956-57 CC-BY 4.0 Instituto Geográfico Nacional.
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