Caleras
Las caleras tradicionales del Alto Guadiana respondieron durante siglos a las necesidades inmediatas de las poblaciones rurales cercanas.
Las caleras tradicionales eran pequeñas estructuras de mampostería refractaria con una boca de carga y una bóveda interior constituida por piedras calizas colocadas ordenadamente y a la que se prendía fuego una vez cargada de fajos de leña a modo de combustible.
La orografía del valle del valle del Alto Guadiana permitía que las caleras se construyesen contra un talud lo que favorecía su carga y su vaciado por parte del calero.
La ubicación de las caleras guardaba estrecha relación con los rodales de matorral, principalmente chasca de encina y romero, combustible imprescindible para la calcinación de la caliza. También se radicaban en base a un buen estrato o veta de piedra fácil de extraer y acarrear; reduciéndose el transporte, en la mayoría de los casos, a unos cuantos volteos de las rocas desde cotas más altas, aledañas al vaso.
Elaboración de cal en una calera tradicional
Elaborar la cal, o hacer una calera, era un trabajo duro que…
Cal, caleras y caleros del Alto Guadiana
Las últimas caleras del Alto Guadiana se quemaron en el año 1969
Los últimos caleros del Alto Guadiana
Recuerdos de un oficio centenario que no debe descansar en el olvido